El imitador de Fher sorprende con su estilo en el Templo de la Imitación; sin embargo, su registro y color de voz genera sentimientos encontrados entre los jurados.
El doble de Daddy Yankee divide opiniones no solo por su falta de parecido vocal al artista original, sino también porque no se esfuerza lo suficiente en el atuendo.
Al Templo de la Imitación llega Yo Me Llamo Thalía, quien porta un top metalizado con grifos como decoración. La participante intenta demostrar que tiene el color de voz de la mexicana.